Desde la década de los años 50 empiezan a tomar fuerza los estudios respecto a la motivación de la persona, por ejemplo encontramos que Maslow habla de una jerarquía de las necesidades (Fisiológicas, de seguridad,  sociales, de estima y autorrealización) dónde señala que el individuo se mueve motivado a satisfacerlas, por otra parte MacGregor propone una teoría X y Y planteando un punto de vista negativo y otro positivo, en el primero la gente demuestra poco interés en su trabajo mientras que en el segundo sucede todo lo contrario.
Para una organización es fundamental que sus empleados estén más motivados intrínsecamente que extrínsecamente para conseguir resultados y por tanto aumentar la productividad, es decir es preferible que exista una motivación que produzca una satisfacción interna que  el factor económico, pues las labores se realizarán con mayor entusiasmo y el interés por la actividad será constante, pues este tipo de motivación perdura en el tiempo.

De acuerdo a lo que se ha venido estudiando a través de los años, se confirma que es importante conservar arriba la motivación del empleado, por eso ahora las empresas se interesan por conocer e implementar estrategias para mantener motivados a sus empleados y un factor importante en dicha estrategia es el papel que desempeña el líder del grupo, por eso es importante también conocer el estilo con  el que el líder  dirige a sus colaboradores en la empresa. 

La universidad Estatal de Ohio y la de Michigan realizaron investigaciones en las que se analizaron dos estilos,  el estilo de orientación hacia el empleado (en la que a  éste se le permitía participar en la toma de decisiones, crear y mantener relaciones amistosas, de confianza y de respeto) y el estilo orientado a la tarea (en la que se supervisa de cerca al empleado para comprobar y asegurarse que el trabajo se realiza satisfactoriamente).  Los resultados que se obtuvieron indicaron que  en el primer estilo es  en el que se presenta una mayor eficacia, sin embargo dicha eficacia también podía afectar según la situación.

Likert comprobó que un líder participativo hace que su organización sea más productiva y efectiva en la fijación de objetivos y metas, es decir que un líder que le permite al grupo fijar metas y tomar decisiones, brindándole confianza y seguridad a sus empleados consigue una motivación fundamentada en recompensas, sentimientos de valor e importancia que logran conseguir de sus colaboradores el mejor desempeño (Likert, 1967).

Un tema que está ligado con la motivación y que se debe tener en cuenta por parte de las organizaciones es el desarrollo personal del empleado, ya que es un punto de gran importancia no solamente porque contribuye al desarrollo personal del mismo sino porque contribuye también en el crecimiento continuo de los procesos que se realizan en la organización por los objetivos que el colaborador va a querer conseguir a nivel profesional lo cual le permitirá obtener logros tanto fuera como dentro de la empresa, por ende éste desarrollo personal le apunta directamente al mejoramiento de la productividad por su satisfacción tanto intrínseca como extrínseca llegando a realizarse laboralmente de manera eficaz y eficiente en beneficio de la misma.
Bamboo surge en un momento en el que los empresarios en Colombia se empiezan a interesar más en sus empleados a tal punto de considerarlos su activo más valioso.   El factor humano es nuestro objetivo por eso estamos al tanto de los últimos estudios científicos llevados en este ámbito para tratar de identificar cuáles son las necesidades del empresario colombiano y ofrecerle nuestra asesoría para incrementar la motivación de sus empleados y enseñarles otros valores que son más importantes que el dinero.